Por  María Alicia Valdés

Egipto, ese maravilloso país que provoca en toda la humanidad una atracción misteriosa, ha sido a través del tiempo el maestro de todas las sociedades.

Pertenece a una de las grandes culturas  de la antigüedad, como lo son la sumeria, china, maya, azteca y egipcia.

Sin embargo, esta última es la única que ha tenido trascendencia milenaria, además es importante resaltar que ha influido hasta en los modernos países occidentales.

De los egipcios hemos heredado una forma de vida cómoda, práctica y, extrañamente, casi todas las artes y las ciencias que en la actualidad investigamos y aplicamos.

Como podemos ver a través de los vestigios ellos desarrollaban, con elevada maestría, diversas disciplinas hace más de cuatro mil años.

Al respecto podemos mencionar a la arquitectura y reconocer que nadie ha podido rebasar su grandeza, majestuosidad, estilo y técnica.

En la medicina alcanzó un crecimiento considerable debido a Im-Hotep, primer ministro de Zoser faraón de la tercera dinastía. El escribió tratados de anatomía, fisiología, cirugía de pulmón, corazón, hígado y estómago, así como también trepanación de tumores cerebrales. Además escribió tratados de farmacopea, de herbolaria y recetarios de brebajes para todo tipo de enfermedades.

Este personaje instituyó entre los eruditos de este pueblo una escuela de medicina que continuó con las investigaciones, llegando a desarrollar en análisis precoz del embarazo y la determinación del sexo del feto. Todo esto se lograba con una muestra química de la mujer embarazada, aplicada a diversas semillas y raíces que germinaban de inmediato en caso de ser positivo el embarazo, sin requerir de nuestro moderno ultrasonido.

Su sistema de producción llamado “Modo de Producción Asiático”, guardaba un equilibrio perfecto entre gobernante y pueblo. Se basa e la concatenación de diversos sistemas económicos como el esclavismo, feudalismo, capitalismo incipiente y comunismo primitivo.

Proporcionando así, de esta manera, a los pobladores una estabilidad sistematizada para evitar al máximo la desocupación, la hambruna y cualquier enfermedad social, obteniendo el gobierno la fuerza y el dominio a tal punto de expandirse fuera de sus límites geográficos y ser reconocido por la historia como el primer Imperio.

En derecho es sorprendente la aplicación de la justicia para normar las relaciones sociales; estas se fundamentaban en las leyes universales de causa y efecto que posteriormente fue llamada “la ley del talión”, insertada en la Biblia como “ojo por ojo y diente por diente”.

La rigidez de las penas que se aplicaban en compensación por un delito obligaban a los pobladores a delinquir, por ejemplo: al ladrón se le mutilaba una mano; la difamación, considerada altamente destructiva de vidas y honores, se castigaba con la extirpación de la lengua; a todo aquel que abandonaba a su familia o a algún hijo, era enviado a la soledad del desierto.

En relación a los tratados de Derecho Internacional, de Derecho Familiar y de muchas otras ramas de esta ciencia, observamos un avance notorio, sus reglas, en algunas ocasiones, las usamos en la actualidad y otras como el otorgar derechos humanos igualitarios a las mujeres, aún no alcanzamos ese nivel.

En contabilidad tenían tal sentido de la aplicación que entregaban recibos por el pago de impuestos.

De esta manera podríamos continuar largamente, enumerando el conocimiento heredado, del pueblo egipcio, a través de diferentes ciencias pero ahora sólo mencionaremos algunas técnicas para la vida práctica.

A ellos les debemos la decoración de interiores, el uso de mobiliario, que incluye todo tipo de mobiliario hasta los utensilios de recamara, baño y cocina, así como la utilización de los cubiertos.

En el arte culinario les debemos la elaboración de platillos combinados y horneados, la preparación del pan y la fermentación de vino y cerveza.

Les debemos así mismo las esencias, los aceites, los perfumes, el maquillaje y las pelucas, todos ellos utilizados para la pulcritud personal. Para la elegancia habían desarrollado los textiles, los diseños en general y la joyería.

Poseían en fin una infinidad de objetos y conocimientos, a través de los cuales podemos constatar, con gran profundidad, que EGIPTO A TRAVÉS DEL TIEMPO forma parte esencial de la hazaña humana.

B I B L I O G R A F I A

·        MALPICA DE LA MADIR LUIS, “La historia Comienza en Egipto con un Acto de Derecho internacional”. Efit: Grijalvo, S.a., 1981. 

·        DRIOTON ETIENE Y JACQUES VANDIER, “Historia de Egipto”. Dit: Universitaria de Buenos Aires, 1970.

·        BARTRA ROGER, “Modo DE Producción Asiático”, Fonde de Cultura Económica, 1968.

·        PIERRE MONTET, “La vida cotidiana en el Antiguo Egipto”, Edit: Planeta, 1991.

·        CIRIL ALDRED, “Los Egipcios, Edit: Ediciones Orbis, S.A., 1986.