El busto de Nefertiti vuelve a mostrarse al p�blico en el Museo Antiguo de Berl�n, en la Isla de los Museos. Una exposici�n grandiosa que reabre el misterio de la m�s deseada y odiada reina del antiguo Egipto .
El 6 de diciembre de 1912, en Armana , Egipto. El arque�logo alem�n Ludwig Borchardt, al frente de varias excavaciones que all� realiza la Sociedad Orientalista Alemana, encuentra tumbado, boca abajo, un busto de yeso de Nefertiti, m�tica reina del tiempo de los faraones, famosa por su belleza y considerada, a partir de ese hallazgo, la `Mona Lisa egipcia�. El busto acab� en Berl�n, y Egipto inici� su larga serie de exigencias de devoluci�n. �sta pudo haberse producido a comienzos de los a�os 30, pero, tras su llegada al poder, Adolf Hitler sentenci�: �Lo que est� en manos de Alemania queda en Alemania�. Hoy sabemos que pensaba sobre todo en el busto de Nefertiti.
Ignorando la debilidad que por �l sent�a el F�hrer, uno de sus ministros, Hermann Goering, hab�a sugerido al rey Fouad I de Egipto que pronto Nefertiti ser�a devuelta. Los planes de Hitler no tardaron en revelarse y a trav�s del embajador alem�n en Egipto, Eberhard von Stoher, inform� al Gobierno egipcio que �l era un ferviente admirador de Nefertiti y que ten�a para ella un sitio de excepci�n en sus sue�os de reconstrucci�n de Berl�n.
�Conozco el famoso busto�, escribi� el F�hrer a las autoridades egipcias. �Lo he observado, maravillado, muchas veces y me deleita siempre. Es una obra maestra �nica, un verdadero tesoro. �Sabe usted lo que voy a hacer alg�n d�a? Voy a levantar un nuevo museo egipcio en Berl�n. Sue�o con ello. Dentro de �l construir� una c�mara coronada por una gran b�veda y en el centro estar� Nefertiti. Jam�s renunciar� a la cabeza de la reina.� Las `facciones arias� de la emperatriz habr�an sido, al parecer, las que habr�an cautivado tan hondamente a Hitler.
Hoy, tras 90 a�os de disputas entre Egipto y Alemania , el busto de Nefertiti vuelve a mostrarse al p�blico en el Museo Antiguo de Berl�n, en la Isla de los Museos. Con esta exposici�n, dice el director Dietrich Wildung, acaba de una vez la larga posguerra muse�stica. Aunque la historia es mucho m�s antigua.
En el a�o 12 del reinado de Akenat�n, hace m�s de 3.000 a�os, los soberanos de Egipto decidieron celebrar una gran recepci�n. Seg�n cuenta la correspondencia diplom�tica investigada por los egipt�logos, las invitaciones fueron enviadas a todos los rincones del mundo antiguo. El imperio egipcio se desmembraba, pero el fara�n, en lugar de enviar arqueros a sus vasallos, opt� por una gran fiesta para que el mundo rindiera homenaje al nuevo fara�n corregente, Nefertiti Anj-jeperure Esmenjkare, su propia esposa.
Akenat�n y Nefertiti se vistieron igual y portaron dos coronas id�nticas. La fiesta fue un derroche, pero el esplendor de la celebraci�n no detuvo la anarqu�a. En poco tiempo, los faraones herejes cayeron en desgracia y la identidad de Nefertiti qued� sepultada bajo la arena de Amarna y el desprecio de las generaciones venideras.
Pero �qui�n es realmente esa mujer? El personaje contin�a siendo huidizo, pero la egipt�loga Joann Fletcher �que defiende que Nefertiti fue fara�n y cree haber descubierto su momia en el Valle de los Reyes� da algunas pistas en su �ltimo libro, titulado El enigma de Nefertiti (editorial Cr�tica) y que saldr� a la venta en octubre.
En contra de las especulaciones sobre su nombre (`la hermosa ha llegado�), no es una esposa enviada de un pa�s extranjero, ya que su nodriza era egipcia y formaba parte de la corte. A los 12 a�os se cas� con Amenofis IV, que m�s tarde cambiar�a su nombre por el de Akenat�n. Esa edad era la habitual para entrar al mundo de los adultos y empezar a procrear, ya que la esperanza de vida de Egipto se situaba en torno a los 35 a�os y ella falleci� alrededor de los 30.
Pero el gran misterio en torno a Nefertiti es si lleg� a reinar como fara�n en Egipto. En este sentido, el escriba egipcio Manet�n, cuya obra redactada en 285 a. C. constituye la base de la cronolog�a del Antiguo Egipto, escribi� que ya en 3000 a. C. �se decidi� que las mujeres pudieran ser coronadas como faraones�, e incluso sit�a a una de estas soberanas al final del periodo de Amarna. En el a�o 75, tras fotografiar todos los sillares, los arque�logos no tardaron en darse cuenta de que Nefertiti aparec�a el doble de veces que Akenat�n.
Al parecer, hab�a sido nombrada corregente de su esposo en calidad de fara�n en su duod�cimo a�o de reinado, y a su muerte ocup� sola el trono como fara�n con el nombre de Anj-jeperure Esmenjkare. Y no le faltaron enemigos.
�Muri� por causas naturales? Cuando la doctora Joann Fletcher encontr� la que cree que es la momia de Nefertiti en la tumba KV35 del Valle de los Reyes, a la reina le hab�an arrancado el brazo donde sujetaba el b�culo y su rostro hab�a sido golpeado. Los estudios posteriores demostraron que las heridas hab�an sido causadas poco despu�s de la muerte con una especie de pu�al o daga, que s�lo pod�a pertenecer a alguien de un rango elevado. Lo m�s curioso es que el atacante le quit� las vendas de lino antes de asestarle las pu�aladas. Joann Fletcher pens� que los sacerdotes de Am�n hab�an hecho todo lo posible para que la reina hereje no tuviera aliento de vida en el reino de los muertos. Sin duda, vivi� y muri� odiada.
Isabel Navarro
Fuente:
http://abc.clubelsemanal.com/web/articulo.php?id=2260&id_edicion=306&salto_pagina=
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