�Las joyas del Nilo.
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El profesor de egiptologia de la UCM Francisco Mart�n Valent�n nos sumerge en los misterios de la ambiciosa exposici�n Faraon, que inaugura la Fundacion Canal. ___________________________________________________________________________ Sobre ellos reca�a el peso de toda la civilizaci�n egipcia. La piedra angular de una compleja sociedd que viv�a bajo el arreglo de las leyes diinas. Personas que, siglos despu�s, despiertan una fascinaci�n apenas superada: son los faraones egipcios, esos hombres tocados por los dioses que monopolizan, junto a los complejos jerogl�ficos, la mente de todo profano que piense en el antiguo Egipto. Los faraones han sido el tema escogido por el Canal de Isabel II para inaugurar las grandes exposiciones del a�o 2006. Siguiendo la estela de la exitosa Los Guerreros de Xian, Faraon desempolva gran parte de la civilizaci�n egipcia y la traslada a la plena Plaza de Castilla. Una muestras imprescindible que ha pasado por Venecia, Londres y Par�s y que desembarca en Madrid avalada por la importancia de los objetos expuestos y por un toque de originalidad que aporta m�s grandiosidad si cabe a la exposici�n. La momia desde dento. En los jardines del Canal se ha construido una pir�mide de mas de 18 metros de altura en la que los visitantes podr�n observar como era una momia por dentro. Momia: viaje interior nos propone un viaje en tres dimensiones al interior de unos vendajes de mas de 2.800 a�os de antig�edad. "Se trata de la momia del sacerdote Nesperennub, excelentemente conservada. Los conservadores brit�nicos a trav�s de esc�neres multidimensionales, la han analizado desde dentro, descubriendo datos como que ten�a 40 a�os cuando muri�, posiblemente a causa de un tumor cerebral, o que padec�a una enfermedad en los dientes. Va a permitir al mundo comprender el tema de la momificaci�n, que normalmente se trata con poco rigor", explica Francisco Mart�n Valent�n, profesor de la Catedra de Egiptologia Jose Ram�n M�lida de la UCM, la primera que se va a impartir de estas caracter�sticas en nuestro pa�s. La base de la cultura, el Rey. La muestra Faraon se completa con 120 piezas traidas del Museo de El Cairo, algunas de ellas de 4500 a�os de antig�edad. A trav�s de varios ep�grafes (el Rey como soberano, el Palacio Real, el Rey en el m�s all�, el Rey como dominador de las tierras extranjeras...), Faraon disecciona la vida de estos personajes tan conocidos como enigm�ticos. "El Rey era la base de la cultura egipcia, el intermediario entre los hombres y los dioses encargado de garantizar el funcionamiento del mundo egipcio con arreglo a las leyes divinas", explica el profesor Mart�n minutos antes de embarcar rumbo a Luxor, donde dirige el Proyecto TT353 (Tumba Tebana), auspiciado por el Ministerio de Cultura de Espa�a y que consiste en la excavaci�n de un monumento de la reina Hatsepsut descubierto en el a�o 1927. Conceptos rescatables. La mina de descubrimientos egipcios es inagotable. "A�o tras a�o surgen yacimientos, nuevas tumbas... es inabarcable", opina el profesor de la UCM. Vestigios f�siscos de una sociedad que despierta cubierta de polvo miles de a�os despu�s de su florecimiento y cuyos secretos enterrados ayudan a comprender c�mo se viv�a entonces... y de la que se podr�a resucitar m�s de un concepto. "Yo rescatar�a casi todo", confiesa Francisco Mart�n Valent�n, "pero me quedo con la Maat, la base sobre la que se levantaba la sociedad, que se refer�a al principio de justicia universal: cada uno sab�a cu�l era su obligaci�n y la cumpl�a, no porque fuera su obligaci�n sino porque sab�a que era lo correcto". Piezas �nicas y desconocidas. Adem�s del viaje por los vendajes de una momia de varios miles de a�os se antiguedad, la exposici�n FARAON va a permitir a los visitantes descubrir aut�nticas joyas desconocidas de la civilizaci�n del Nilo. Entre las 120 piezas que se podr�n contemplar, algunas no hab�an cruzado nunca la frontera del pa�s de las pir�mides. De las piezas m�s espectaculares e importantes destaca el coloso de Tut-Anj-Amon, una estatua de tres metros de altura y de m�s de tres siglos de antig�edad, que fue encontrada en el templo funerario de Ay y Hor-em-Heb en Tebas Norte. Tambien merece una atenta visita la estatua del Rey Quefran, perteneciente a la Dinast�a IV, que atesora m�s de 4500 a�os a sus espaldas, o el lecho del legendario Tut-anj-Amon, de la Dinast�a XVIII, quien contaba en su ajuar funerario con seis camas de uso cotidiano, adem�s de varios lechos m�gicos. Por Lourdes Sanz Fuente: NOTICIAS DE LA U. Madrid, 16 de Diciembre de 2005. � � � � � � |
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