Título de Noticias

Septiembre 2009

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SE RE�NE LA COMISI�N DE SEN EN MUT: UN PROYECTO PARA LA ETERNIDAD

El pasado viernes se reuni� la comisi�n del SEN EN MUT, UN PROYECTO PARA LA ETERNIDAD del Instituto de Estudios del Antiguo Egipto.�

Dicha comisi�n pondr�n en los proximos dias una� serie de iniciativas�al objeto de conseguir fondos para realizar la replica de la camara de Sen en Mut que contiene el techo astronomico mas antiguo de la humanidad -la Capilla Sixtina de los techos egipcios- como lo bautiz� hace ya ocho a�os el Dr. Francisco Martin Valentin, Director del I.E.A.E y del Proyecto Sen en Mut. �

La comisi�n esta integrada por Javier Cebadera, Lourdes Narvaez, Jose Mora, Raquel Perez, Jose Luis Rodriguez, Francisco Lucena, Rocio Gutierrez, Maria Agust�n, y Susana y Lola Villarrubia.

comisiónLa La comisi�n de Sen en Mut: un proyecto para la eternidad

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SEN EN MUT, UN PROYECTO PARA LA ETERNIDAD

La TT 353, el hipogeo que penetra en el coraz�n los roquedos del circo de Deir El Bahari, en Luxor occidental, es uno de los monumentos m�s impresionantes, entre los pertenecientes a la dinast�a XVIII del Imperio Nuevo egipcio.

Cuando su propietario, el Mayordomo de Am�n Sen-en-Mut, orden�que fuera excavado relacion�ndolo con el santuario dedicado a la diosa Hat-Hor, en el interior del templo de Hatshepsut, en Deir El Bahari, se cre� por primera vez en la historia de Egipto un ‘pasadizo m�stico’ que podr�a conducir a su due�o desde el mundo de los simples mortales a las regiones celestes, reservadas solo a los reyes y a los dioses.

Sen-en-Mut estableci�la ruta, a trav�s de las estrellas, por la cual alcanzar�a el destino eterno que se hab�a decretado para �l por gracia del fara�n Hatshepsut Maat-Ka-Ra.

El plano de esta v�a celestial fue dibujado dentro del hipogeo, en el techo de su primera c�mara. Este magn�fico documento, el m�s antiguo que conoce el mundo, entre los dedicados a plasmar las v�as de lo celeste, fue concebido por el gran sabio Sen-en-Mut, a partir de los conocimientos milenarios del Antiguo Egipto, ya antiqu�simos en su tiempo, que �l pudo adquirir consultando las bibliotecas de los templos, registros arquet�picos del saber humano m�s ancestral.

�l orden� esculpir en los muros de esa c�mara �nica una recopilaci�n de textos que facilitar�an sus transformaciones m�sticas. As�, ensalmos y techo astron�mico configuraron el libro de piedra que recoger�a lo m�s granado de la ciencia metaf�sica de los antiguos egipcios.

Este tesoro �nico debe ser protegido para conseguir su preservaci�n y su mejor conocimiento por el mayor n�mero de personas posible.

Despu�s de ocho a�os de trabajo, empleados en el estudio y la restauraci�n de este extraordinario monumento, el Instituto de Estudios del Antiguo Egipto, convoca a su salvamento, promoviendo la iniciativa de realizar una copia facsimilar de la c�mara del ‘techo astron�mico’ existente en su interior. Ello permitir� exhibir esta maravilla del arte egipcio a las personas interesadas en conocerla o estudiarla, sin verla sometida a factores destructivos.

Desde aqu�� hacemos una llamada universal y colectiva para incorporarse a esta magn�fica tarea: �Salvemos para la historia de la humanidad esta Capilla Sixtina astron�mica del Antiguo Egipto!. �

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Dr. Francisco J. Mart�n Valent�n

Director del IEAE y del�Proyecto Sen-en-Mut TT 353

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EL DR. ZAHI HAWASS Y EL PROYECTO SEN EN MUT


El pasado d�a 2 de Agosto y como parte de las pr�cticas del Curso de Formaci�n Egiptol�gica que imparte el Instituto de Estudios del Antiguo Egipto en colaboraci�n con la Fundaci�n General de la Universidad Complutense de Madrid, llevadas a cabo en Egipto, tuvo lugar en el Sal�n de Actos del SCAE en Zamalek la conferencia La Misi�n Arqueol�gica Espa�ola en Sen en Mut a cargo del Director de la misma el Dr. Francisco Mart�n Valent�n.


Sede del Consejo Supremo de Antig�edades de Egipto

Dicho acto fue organizado por el Instituto Cervantes de El Cairo, como organismo del Ministerio de Cultura de Espa�a bajo cuyos auspicios se ha desarrollado el ‘Proyecto Sen en Mut’ y con la amable acogida del Secretario General del Consejo Supremo de Antig�edades de Egipto, Dr. Zahi Hawas.

En el transcurso del acto el Dr. Mart�n Valent�n expuso ante las autoridades egipcias, los colegas, y el numeroso p�blico asistente, el resultado de los siete a�os de trabajo, durante los cuales, el equipo espa�ol ha puesto en valor uno de los monumentos m�s importantes de la dinast�a XVIII en la zona tebana.�


El Dr. Francisco Mart�n Valent�n

Antes de comenzar la conferencia

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Catalogada como la TT353 (Tumba tebana 353), fue excavada por orden de uno de los personajes mas fascinantes de este periodo: el Mayordomo de Am�n Sen en Mut. Este hombre que trabajaba al servicio de la reina Hatshepsut fue tambi�n el art�fice del magnifico templo que el fara�n Hatshepsut mand� construir al pie de la monta�a tebana, en la zona hoy conocida como Deir el Bahari.�


Antes de comenzar la conferencia

A unos escasos metros, y al abrigo de una terraza natural, Sen en Mut orden� construir en este lugar sagrado el peque�o hipogeo que cuenta con tres c�maras a 100 metros de profundidad, de las que la primera de ellas, conserva el techo astron�mico m�s antiguo de la humanidad.

Seg�n el Dr. Mart�n Valent�n y su equipo, Sen en Mut no abus� de la confianza de la reina Hatshepsut a la hora de ocupar este espacio sagrado tan vinculado al templo de Millones de A�os� de la reina, sino que el mismo fue excavado y preparado con la autorizaci�n y conocimiento de aquella.


Algunos alumnos del I.E.A.E.

Adem�s, en la c�mara anteriormente mencionada, que se encuentra repleta de textos, existen algunas inscripciones donde Sen en Mut pone de manifiesto los verdaderos sentimientos hacia su reina: un afecto que iba m�s all� de la mera lealtad hacia su soberana.

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Al termino de acto, el Dr. Zahi Hawas� acept� posar con el grupo de estudiantes del I.E.A.E.


El Dr. Zahi Hawass con el grupo del I.E.A.E.

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ENTREVISTA-"CON HATSHEPSUT SE PRODUCE LA PRIMERA REVOLUCI�N POL�TICA DE LA HISTORIA"

En su nuevo libro, los egipt�logos espa�oles rescatan del olvido la verdadera historia de la mujer que durante 22 a�os dirigi� el pa�s del Nilo.

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� Paul A. Putman

Caracteres contrarios pero una gran compenetraci�n entre ellos. Son una trenza que aportan distintas impresiones. Ella es feeling femenino y �l es cauteloso. Ella es apasionada, y �l meticuloso. Ella arranca y �l matiza. Podr�amos estar hablando de los personajes de su nuevo libro sin embargo as� es la pareja formado por Teresa Bedman y Francisco J. Mart�n Valent�n, los espa�oles que han desenterrado los grandes. Ambos ocho a�os al mando de la Misi�n Arqueol�gica Espa�ola del Proyecto Sen-en-Mut en Deir El Bahari.

GEO: �Qu� novedades nos ofrece su libro?�

Francisco: Poner a conocimiento del p�blico en general y de manera rigurosa nuestro trabajo despu�s de ocho a�os, a partir de las impresiones que hemos recibido de los estudios en el hipogeo TT353, del personaje y del periodo de la dinast�a XVIII, muy importante en historia de Egipto. Quer�amos dejar constancia que existen una clase profesional egiptol�gica en Espa�a capaz de aportar conclusiones directas de lo que observan no s�lo de la referencias a tercero. Esto es importante para crear escuela.

Teresa: En el libro hay mucha novedad porque aunque hay biograf�a escritas hemos intentado no influenciarnos con nadie. Nos hemos amparado en datos arqueol�gicos en nuestras propias conclusiones de nuestro momento en Sen-en-Mut y aqu� 450 p�ginas.

GEO- �Qu� supuso que una mujer fuera fara�n?�

Francisco: Ella fue la tercera mujer que se convirti� reina de Egipto. Antes hab�a habido otras dos, aunque fue la primera en utilizar el t�rmino fara�n que proviene de la palabra egipcia Per-Aa que significa casa grande o palacio.

Teresa: Es Hatshepsut quien sustenta el t�rmino fara�n por primera vez. A�n as� la historiograf�a moderna la ha tratado muy mal. Nunca le dedican m�s de dos l�neas, y son para decir que fue una mujer ambiciosa que le usurp� el poder a Thutmosis III. Para nada esto es cierto, ella hizo grandes cosas.


Portada del libro:
Hatshepsut, de Reina a Fara�n de Egipto

GEO- Por ejemplo

Teresa: Ella, junto con su mayordomo Sen-en-Mut, organizan la primera expedici�n comercial a pa�s del Punt para buscar algo tan importante para el culto egipcio como es el incienso. Es la primera expedici�n no militar, lo que conlleva una compleja log�stica y un despliegue impresionante.

GEO- Entre Hatshepsut y el mayordomo real Sen-en-Mut, �existi� un historia de amor?�

Francisco: Desde un punto de vista cient�fico y documental no hemos encontrado, ni encontremos un cartel que ponga Sen-en-Mut ama a Hatshepsut ni viceversa. Sin embargo en el interior de las inscripciones que estamos traduciendo, hay una serie de inscripciones en las que �l se declara como el servidor verdadero de la reina, algo as� como el que hace sus favores en el lugar de su coraz�n.

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Divinizaci�n de Sen-en-Mut por Hatshepsut

GEO- �Qu� quiere decir?�

Francisco: Esta inscripci�n, vista fuera de contexto, s�lo expresa la lealtad de un funcionario. Pero la diferencia de edades, la defensa y divinizaci�n de Sen-en-Mut por Hatshepsut, la criptograf�a para que no se persiga su nombre ni se destruya su memoria, m�s otros muchos datos, raz�n por la que hemos tenido que escribir el libro, se puede llegar a afirmar que s� la hubo. El proceso de divinizaci�n que hace para protegerla como mujer es �nico en la historia. Si esto no es amor se le parece mucho. As� es que desde un punto de vista arqueol�gico tenemos indicios m�s que de sobra.

GEO-� Qu� otras pistas ten�is para creer en la relaci�n de plebeyo y reina para toda la vida?

Teresa: Hatshepsut�tiene dos hijas conocidas. A la primog�nita le hacen desposarse con su hermano, Thutmosis II un cr�o de 10 a�os. De ellos nacer�a la princesa Neferu-Ra. Sin embargo, haciendo c�lculos sobre su nacimiento, y el hallazgo de una iconograf�a en la que Sen-en-Mut abraza a la princesa de una manera protectora, no se corresponder�a. La calidez de las distintas estatuas va m�s all� de la obligaci�n de protector. Neferu-Ra ya hab�a nacido cuando te�ricamente se ha desposado con su medio hermano.


� I.E.A.E.

GEO: �Qu� sugieren?�

Teresa: La �nica persona que est� cerca de Hatshepsut es Sen-en-Mut. �l inventa a Hatshepsut para que se convierta en rey de Egipto. �l le da todo los apoyos m�sticos, religiosos y de poder para que logre ser fara�n de Egipto. Tiene que haber una relaci�n m�s all� de la del vasallo fiel.

GEO- �Qu� les hizo ver la conexi�n entre los personajes?�

Francisco: La orientaci�n. Nosotros sospech�bamos que no era una tumba y traduciendo los textos llegamos a la conclusi�n de que nunca pudo ser una tumba. Lo que Sen-en-Mut�intenta hacer en el templo es obtener una transformaci�n espiritual que coincida con una fecha se�alada los quince a�os de reinado, un ciclo m�gico para los egipcios, que significa la confirmaci�n y regeneraci�n de su reinado. Si se une con que el hipogeo se halla dentro del templo, y que el esp�ritu de Sen-en-Mut�se une, como si fuera rey, al destino que ella pod�a tener se est� confirmando tambi�n la uni�n m�stica o religiosa que hab�a entre ambos. Este es otro hallazgo espectacular. Esto lo sabemos por el techo astron�mico que tiene la c�mara que es el m�s antiguo de la humanidad, y por las inscripciones.

Teresa: Para entender la historia de ellos dos hay que conocer la misticidad de la vida egipcia. La orientaci�n del eje nos lleva desde sus ojos hasta los ojos de ella hasta, pero tambi�n hemos encontrado puntos de conexi�n que crear un tri�ngulo formado por el valle de los Reyes, la tumba KV20, el templo Deir El Bahari, la capilla T353, el r�o Nilo, el templo de Karnak, y Luxor. Uniendo todos los puntos se crea un tri�ngulo perfecto que en jerogl�fico significa Supedet. Set-en-Mut engloba todos los puntos m�gicos dentro del triangulo para representarla a ella.


� I.E.A.E.

GEO-�Por qu� deb�a protegerla?�

Teresa: Por que dan un paso al frente muy revolucionario. Chocaba con todo lo anterior. Era previsible que su memoria ser�a perseguida. Una de las cosas que tem�an los egipcios era la segunda muerte, la de borrar sus nombres. Por eso se atreve a poner su nombre de forma cr�ptica para que nadie pudiera destruir su memoria, para que su historia perdurase y con este libro se demuestra que de hecho ha perdurado.

GEO- �Qui�n quer�a borrar su memoria?

Francisco: Antes de nuestras investigaciones se dec�a que hab�a sido su sucesor Thutmosis III, el art�fice que hab�a destruido su memoria. Parec�a que ciego de odio y de rabia hab�a destrozado todas las referencias de su t�a como fara�n, no como reina. Sin embargo, con el tiempo y mucho estudio, se observa que la persecuci�n fue tard�a, y que los art�fices de su destrucci�n fueron los reyes de la dinast�a XIX, entre los que se encuentra Rams�s II y Seti I. Ellos de manera met�dica, implacable y cient�fica van destrozando uno tras otro, los templos y los nombres de la reina, todo aquello donde hubiera alguna referencia sobre ella lo usurpan, lo trocean. De manera que consiguen borrar pr�cticamente su memoria.

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Hatshepsut, alto linaje

GEO- � A qu� se debe la fortaleza e impulso de Hatshepsut?

Teresa: Hatshepsut es digna biznieta de Amen-Hotep. En Egipto cerca del siglo XVI a.C hay una invasi�n militar donde mueren muchos hombres entre ellos el padre y el marido de Amen-Hotep. Entonces ella se pone al frente de las tropas hasta que su hijo cumpliese la mayor�a de edad. De ah� viene la fuerza de estas mujeres, de Amen-Hotep y su hija Nefertary, las encargadas de transmitir la legitimidad de la sangre din�stica. Por ello Hatshepsut reivindica ser hija de su madre en�rgicamente.

Francisco: Tras estudiar e investigar c�mo se funda la dinast�a XVIII, a la que Hatshepsut pertenece, y analizando todos los marcos pol�ticos y religiosos que desvelan la�arqueolog�a, sabemos que proviene de una familia de cofundadoras del Imperio Nuevo y finalizadoras de la dinast�a anterior con un enorme prestigio. Hatshepsut trae una carga de poder que le obliga a coger las riendas, como hizo su bisabuela, y lo hizo sin tapujos. Este es el proceso an�malo que los que vienen despu�s no perdonan.

GEO-�Por qu� no se ha conocido hasta ahora?�

Teresa: El gran problema de la egiptolog�a es que no se ha sabido interpretar la figura de la mujer puesto que siempre era descubierto por hombres. Sumado a la poca investigaci�n, Hatshepsut ha estado en un marco pintado.

GEO- Ante tal destrucci�n y con el paso de los a�os, �c�mo ha llegado hasta nosotros?


� Paul A. Putman

Francisco- Hatshepsut reina desde 1480 a.C. Gracias a un historiador egipcio llamado Manet�n en el siglo III a.C que se encarga de hacer una historia de Egipto y buscando en los templos aparece su nombre en los archivos y en la memoria colectiva. Todo lo que hab�a hecho los reyes por intentar borrar oficialmente su memoria de todos los templos no lo hab�an conseguido…su memoria hab�a quedado latente. Manet�n la rescata.

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GEO- Hay un antes y un despu�s tras Hatshepsut.�

Francisco: Se produce la primera revoluci�n pol�tica de la tenemos noticias en la historia. Hab�a una l�nea din�stica establecida que admit�a que estas mujeres eran las encargadas de suceder el trono. Tras la muerte de Hatshepsut se produce un cambio interno y estatal; quieren que las mujeres contin�en legitimando el poder pero de manera oculta, para que no se siguiera produciendo la doble situaci�n din�stica. Fue un movimiento pol�tico muy importante en la historia de Egipto, que paso desapercibido porque lo borraron muy bien. Y ahora lo estamos descubriendo.

Teresa: Seg�n la mitolog�a egipcia la funci�n de la reina es legitimar con su matrimonio al rey. Un pr�ncipe por ser hijo de rey no tiene derecho a trono per se, siempre necesita casarse con su hermana porque es ella la que legitima el trono. Esta es la ley divina. Estas mujeres reivindican la cesi�n del trono a trav�s de su vientre y dan ese paso al frente.

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� Texto: Ana Palicio Pire

Fuente:http://www.mundo-geo.es/viajes-y-expediciones/expediciones/con-hatshepsut-se-produce-la-primera-revolucion-politica-de-la-historia?page=2

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Agosto 2009

ARQUE�LOGOS ESPA�OLES EXPONEN LAS CONCLUSIONES DE SU MISI�N EN EGIPTO

El egipt�logo espa�ol Francisco Mart�n expuso hoy en El Cairo el resultado de seis a�os de trabajo en una tumba del �rea de Deir el Bahari en Luxor, al sur del pa�s, con la conclusi�n de que este monumento es en realidad una capilla secreta.

El equipo espa�ol ha trabajado desde abril de 2003 en el proyecto Sen en Mut, que ha consistido en la restauraci�n, protecci�n y documentaci�n de un hipogeo catalogado como tumba tebana (TT 353) y que fue descubierto en el a�o 1927 por el arque�logo estadounidense Herbert Winlock.

Sin embargo, Mart�n asegur� hoy en la sede del Consejo Supremo de Antig�edades de Egipto que este monumento es en realidad, seg�n las conclusiones de su trabajo, "una capilla cenotafio secreta vinculada al templo de Hatshepsut" en el �rea de Deir el Bahari.

Sen en Mut, arquitecto real y mayordomo del dios Am�n, fue el asesor de la reina Hatshepsut (1479-1457 a.C) y construy� el templo de Deir el Bahari para la c�lebre soberana.

Algunos de los indicios que han llevado a la misi�n arqueol�gica espa�ola a concluir que la TT 353 se trata de "un monumento templario y ritual", a juicio de Mart�n, es que ya existe otra tumba de Sen en Mut, donde fueron encontrados los restos de sus padres.

Adem�s, el supuesto sarc�fago de Sen en Mut tiene un tama�o excesivo para poder haber sido introducido en esta tumba tebana, y en la zona se descubrieron objetos que se utilizaban en los templos, explic� Mart�n.

Por otro lado, la vinculaci�n ritual entre este monumento y la capilla de Hat Hor en el templo de Hatshepsut queda patente en una decoraci�n de dos ojos presente tanto en la estela de falsa puerta de la primera c�mara de la tumba como en la capilla.

La TT 353, capilla secreta a juicio de los arque�logos espa�oles, consta de un t�nel de 97,3 metros de longitud que conecta tres c�maras, la primera de ella completamente decorada.

En esta c�mara se encuentra lo m�s destacado del monumento, un techo astron�mico que ofrece una cronolog�a del mandato de Hatshepsut y Tutmosis III, y que es "el m�s antiguo de la humanidad", seg�n Mart�n, quien lo denomin� "la capilla sixtina egipcia".

Durante los seis a�os que ha durado la misi�n, apoyada por el Ministerio de Cultura de Espa�a, el equipo ha encontrado fragmentos de paramentos con jerogl�ficos y abundantes restos cer�micos del Imperio Nuevo, entre otros.

Adem�s, la misi�n se ha encargado de la limpieza del interior de la tumba, as� como de la construcci�n en el exterior de muros de protecci�n para evitar que posibles riadas de agua entraran en el hipogeo.

El trabajo de campo en este �rea ya ha finalizado y los arque�logos espa�oles intentan ahora que se construya una r�plica exacta del monumento para que se pueda visitar el interior sin estropear el original.

En noviembre, si todo sale seg�n lo previsto, el mismo equipo, encabezado por Francisco Mart�n y Teresa Bedman, ambos del Instituto de Estudios del Antiguo Egipto, comenzar� un nuevo proyecto, la tumba 28 de Amenhotep, visir del rey Amenhotep III, de la dinast�a XVIII, en la zona de Asasif.

El Cairo, 2 ago (EFE).

Fuente: www.elconfidencial.com

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CONFERENCIA: LA MISI�N ARQUEOL�GICA ESPA�OLA EN SEN EN MUT

Invitación Sen-en-Mut
El d�a 2 de agosto de 2009 el Dr. Francisco Mart�n Valent�n dar� una conferencia sobre los trabajos de la Misi�n Arqueol�gica Espa�ola en Sen en Mut en El Cairo.

Direcci�n:

sala de conferencias Ahmed Pacha Kamal

C/ El Adel Abu Bakr, Zamalek, El Cairo - Egipto

Tel�fono: 27365645

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Para ayudar al Proyecto Sen en Mut
http://www.institutoestudiosantiguoegipto.com/senenmut/es/amigos.shtml

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Junio 2009

HATSHEPSUT: LA HISTORIA DE UNA VIRTUOSA FARAONA QUE SE ADELANT� A SU TIEMPO

Ha sido descrita durante d�cadas como una reina ambiciosa y sin escr�pulos y, sin embargo, se desconoc�a que la figura de Hatshepsut albergaba mucho m�s. Dos egipt�logos, Francisco J. Mart�n Valent�n y Teresa Bedman, aportan �ahora, tras seis a�os de trabajos de excavaciones en las inmediaciones de su templo en Luxor, una nueva perspectiva sobre uno de los personajes m�s interesantes de la Historia egipcia.


Han pasado doscientos a�os desde que Champollion incluy� el nombre de Hatshepsut en la genealog�a de los reyes de la dinast�a XVIII y a�n hoy su figura posee un halo de misterio. Tras d�cadas de estudios dispersos sobre esta faraona, que gobern� Egipto durante 22 a�os (1479-1458 a.C), los egipt�logos Francisco J. Mart�n Valent�n y Teresa Bedman aportan ahora, con la publicaci�n de Hatshepsut. De reina a fara�n de Egipto (Esfera de los Libros), una nueva perspectiva sobre una mujer que ha sido encasillada en la ambici�n y las ansias de poder.

Despu�s de seis a�os al frente de la Misi�n Arqueol�gica Espa�ola del Proyecto Sen en Mut (TT 353) en Deir El Bahari, Mart�n Valent�n y Bedman han dado forma a una historia, la de Hatshepsut, que no siempre ha sido bien entendida y que no ha estado exenta de las interpretaciones entre quienes la han estudiado. Desde finales del siglo XIX hasta la mitad del siglo XX, la historia de esta faraona ha sido objeto de varias publicaciones, escritas en su mayor�a por hombres y bajo el prisma cultural de la inferioridad femenina. En el caso de la biograf�a que ahora presentan Mart�n Valent�n y Bedman, esta �ptica cambia. “Nadie hasta ahora hab�a incidido en por qu� una mujer trata de hacerse faraona en Egipto, algo muy raro y especial”, comenta Mart�n Valent�n, tambi�n director del Instituto de Estudios del Antiguo Egipto

Una mujer de principios


Con la idea de dar una explicaci�n “no alternativa pero s� m�s profunda, razonada y veros�mil”, las p�ginas de la biograf�a elaborada por estos egipt�logos analizan a Hatshepsut, una de las tres mujeres que, en 3.000 a�os, fueron “rey de Egipto”. Hija de Tutmosis I y de la esposa real, la reina Ah-M�s Ta-Sherit, debi� conformarse con casarse con su hermanastro Tutmosis II para cumplir con la legalidad. La corta edad de �ste facilit� su avance hacia el preciado trono, legitimado, seg�n las referencias hist�ricas, el d�a 29 del segundo mes de Peret del a�o II del reinado de su padre cuando el or�culo del gran dios tebano le comunica que ser� reina-fara�n. La ruptura de la tradici�n no fue aceptada por sus contempor�neos y de ah� que fuera tildada de ambiciosa y tirana. El resultado fue una campa�a orquestada por Tutmosis III para borrar de la memoria su legado y su persona.

Pero, �qui�n fue entonces Hatshepsut? Mart�n Valent�n la define como una mujer “inteligente, agraciada, muy curiosa, una gran estadista y con instinto pol�tico”. Seg�n el egipt�logo, “comprendi� la situaci�n de Egipto al prescindir de las campa�as militares y fomentar el dominio comercial y cultural”. Asimismo, a�ade, “reafirm� la presencia femenina, heredada de las mujeres del principio de la dinast�a, para transmit�rselo a su hija [Neferu Ra] con la idea de crear una rama femenina que tuviera la misma importancia que el rey, al que respetaba".

As� pues, el objetivo de estos egipt�logos ha sido intentar explicar el personaje justific�ndolo en su comportamiento, sin obviar ese movimiento emprendido por las mujeres de la dinast�a XVIII que encontr� en Hatshepsut el c�lmen al convertirse en fara�n y reinar durante un periodo en el que no hubo p�rdidas territoriales, las cuentas marcharon bien y se impuso la paz.

Mayordomo en la sombra

Pero no lo hizo sola. Sen en Mut, su preceptor, tuvo mucho que ver. Convertido en uno de los hombres m�s poderosos de la corte real, fue la sombra de la reina. Arquitecto de profesi�n y encargado de erigir el templo de la reina en Deir El Bahari, supervis� todas sus decisiones y administr� sus bienes. Pese a su origen modesto, goz� de privilegios que a�n hoy desconciertan a los egipt�logos, como, por ejemplo, hacerse esculpir en los templos junto a la reina. Detalles que han llevado a muchos estudiosos a coincidir en la posible relaci�n sentimental entre ambos.

Es tal la importancia de este personaje, que su estudio es fundamental para entender la figura de Hatshepsut. As�, la misi�n de Mart�n Valent�n y Bedman en su hipogeo (capilla o edifico subterr�neo construido por Sen en Mut) ha dado como resultado hallazgos sorprendentes. Localizado en las zonas aleda�as al templo de la reina, la investigaci�n del equipo espa�ol se top� con que esta construcci�n hab�a sido excavada en funci�n de la capilla Hat-Hor, en el interior del templo de la reina. Mart�n Valent�n lo explica: “Desde el fondo de la tumba en la tercera c�mara del hipogeo hay que imaginar un eje hacia arriba que encaja, 268 metros hacia el exterior, con el punto medio de un par de ojos en la capilla de esta diosa dentro del templo”. Un descubrimiento, comenta, “capital y, como tantos otros, casual”.

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Aunque es vital el estudio de una tumba para adentrarse en el an�lisis del personaje, tambi�n es trascendental el hallazgo de su momia. La de Hatshepsut fue identificada en 2007 tras tiempo en el Museo de El Cairo sin que nadie se percatara, mientras que la de Sen en Mut sigue siendo un misterio. Aunque se ha puesto en marcha el estudio de una momia an�nima encontrada en 1881 y que podr�a encajar con la fisonom�a de este personaje, no hay ninguna conclusi�n todav�a al respecto. “Su hallazgo no cambiar�a la historia pero s� permitir�a sacar del anonimato la momia de esta figura trascendental”, comenta Mart�n Valent�n. Las pruebas de ADN har�an el resto. “Se comparar�a la carga gen�tica con las momias de sus padres, que fueron halladas en los a�os 30, y se podr�a dar con su identidad”, a�ade. “Es obligaci�n de la egiptolog�a recuperar no s�lo los restos de la momia, sino de los templos para completar el puzzle”, sentencia esperanzado.

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Fuente: http://www.elimparcial.es/cultura/hatshepsut-la-historia-de-una-virtuosa-faraona-que-se-adelanto-a-su-tiempo-42566.html

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Leer Noticias del 2008

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